jueves, 3 de septiembre de 2020
Los misterios no resueltos de la amazonia.
miércoles, 2 de septiembre de 2020
LA ENIGMÁTICA PIEDRA DEL DESTINO
Antiquísimas sagas celticas, como La batalla de Mag Tuired, narran que los Tuatha de Danann –el pueblo procedente de la imprecisa isla del norte del mundo- desembarcaron en la noche de los tiempos en las costas irlandesas. Ellos fueron los transmisores de la religión druídica a los indígenas, pero también transportaban una serie de elementos mágicos, entre los que se encontraba la Piedra del Destino, un bloque de piedra arenisca que jugaba un papel protagonista en las ceremonias de coronación de los reyes de esa misteriosa civilización nórdica.
Durante la edad media, la
Piedra del Destino acabó en Escocia, empleándose en el ritual de investidura de
los nuevos monarcas del país. En el siglo XIII, el rey Eduardo I de Inglaterra “capturó”
el bloque de arenisca para emplear sus capacidades mágicas en las coronaciones
de los reyes ingleses. Permaneció cientos de años en la abadía londinense de
Westminster, a pesar de las reiteradas peticiones para que fuese devuelta a sus
propietarios escoceses. En 1950, cuatro estudiantes consiguieron hacerse con la
piedra y la trasladaron a Escocia. Sin embargo, las autoridades acabaron localizándola
e inmediatamente volvió a la abadía de Westminster, a tiempo para la coronación
de Isabel II de Inglaterra en 1953. Finalmente, en 1996 el gobierno británico devolvió
la piedra a Escocia, donde puede ser vista hoy en día en el Castillo de
Edimburgo.
La ciber guerra y el Día cero
Una batalla que podría conducir a escenarios catastróficos, ya que,
incluso, algunos especialistas en informática hablan de que el mundo podría
derivar en un ciberataque de gran escala, conocido como Día Cero, con el que
todos los sistemas dejarán de funcionar, lo cual implicaría un gran apagón
digital a nivel global.
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martes, 1 de septiembre de 2020
LA ISLA VERDE
Hace unos 12.000 años, en el Mar del Norte existía una inmensa tierra verde que fue tragada por las aguas del deshielo tras el fin de la última glaciación.
Es la conclusión de dos
buceadores que, a finales de enero de 2018, descubrieron sumergido un bosque de
dimensiones colosales al Este de Inglaterra. Se sospecha que sus enormes
árboles, tapados por capas de arena, quedaron al descubierto tras las feroces
tormentas que azotaron los mares ingleses, al igual que ocurrió con otros
bosques sumergidos cuyas copas pueden verse hoy frente a las costas de Gales y
Cornualles, al sudoeste de esa isla… Lo sincrónicamente fascinante es que esta
noticia con otra serie de descubrimientos en otros lugares del mundo. Y la ubicación
de estos descubrimientos en el Atlántico norte nos hace pensar en la mítica Hiperbórea.
Ese y el de Tule son los nombres que dieron los griegos a una legendaria y sagrada tierra situada en el
extremo norte, fértil, templada y protegida por una muralla de hielo.
Hasta ahora los académicos
habían pretendido identificarla con lugares tan distantes como Escandinavia,
las islas del Mar del Norte, Islandia, Groenlandia e Irlanda. Lo hicieron
ignorando que todas las epopeyas irlandesas afirman que una elevada civilización
les llegó de una enorme Isla Verde donde no se ponía el Sol, situada por tanto
cerca del Ártico. Sin molestares en pensar que pudo existir realmente un paraíso
nórdico como el descrito por esas y otras tradiciones, que luego habría quedado
sumergido. Paralizados por la idea de que bastaba ya con la creencia en una
inexistente Atlántida como para alimentar la mitomanía colectiva con la de otro
paraíso perdido. Dejando tales delirios para científicos locos como los del Tercer
Reich que, al romper los moldes de lo admisible y por mucho que hoy nos
disguste admitirlo, pusieron las bases de la tecnología nuclear, la carrera
espacial y otros saltos tecno-científicos inimaginables… Burlar los límites de
lo aceptable, hablando de temas que harían sonreír a la mayoría inmovilista.
36 RAZAS EXTRATERRESTRES HABITARÍAN EN NUESTRA GRALAXIA, SEGÚN ESTUDIO.
Según dice Ball en el estudio realizado:
Los GRB pueden ser señales transmitidas por
civilizaciones y razas extraterrestres. La forma temporal de las ráfagas en el
transmisor es probablemente un pulso simple y las formas complejas que vemos se
deben a distorsiones en el camino, principalmente a las lentes gravitacionales.
Hasta donde sabemos, los rayos gamma ofrecen el ancho de banda de
comunicaciones más amplio en el espectro electromagnético y la única manera
factible de enviar grandes cantidades de información a distancias
intergalácticas”.
Ball incluso cree que las señales podrían
contener «semillas de vida» que pueden prosperar en planetas particulares.
Ball agregó: «Los mensajes en GRB pueden ser
esporas que se multiplican cuando aterrizan en un entorno de crianza apropiado.
Propagan enormes cantidades de esporas y esperan solo un porcentaje de un minuto
para sobrevivir».
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lunes, 31 de agosto de 2020
EL HOTEL DE LOS SUICIDAS
Construido en 1923 por una firma alemana e inaugurado en 1927, dicen que el artífice de esta belleza hacha piedra fue el arquitecto Carlos Arturo Tapias, aunque otros aseguran que en realidad fue obre de Pablo de la Cruz. Lo que sí sabemos es que la iniciativa corrió a cargo del entonces presidente Pedro Nel Ospina. La idea era hacer una estación de tren que sirviera de parada para el ferrocarril del sur, pero la hermosura de su mirador y elegancia arquitectónica pronto atraerían la atención no sólo de los viajeros que se detenían en aquella estación y se asomaban a admirar la catarata, sino de cientos de personas llegadas de todas partes, motivo por el cual acabó convirtiéndose en un hermoso hotel. Todavía hoy produce asombro pensar cómo en un tiempo en el que no había carreteras y acceso a la zona era tan dificultoso, pudo llevarse tamaña empresa constructora. Más si pensamos en el resultado de la misma.
En mitad de un paraje
montañoso, a ras de un acantilado en el que se asoman todos los vértigos, el
Hotel del Salto, un edificio de estilo francés y emplazado en un lugar
extraordinario, abre su mirador frente a una cascada de 157 metros, en la que
abisman las aguas hacia un ineludible destino, elegido por los suicidas que
acuden hasta allí. En este contexto, los relatos sobre espectros y fenómenos anómalos
que rodean al establecimiento cobran más sentido.
Para los lugareños,
estos fantasmas no son sino las almas en pena de quienes acudieron a este escenario
decididos a poner fin a sus vidas. No sin motivos, el fondo de tanta angustia,
la base de la cascada, acabó bautizándose como “Lago de los muertos”.
Tiene alrededor de 1470
cuadrados distribuidos en cinco niveles y construidos sobre el mismísimo abismo,
no podían pasar desapercibidos en aquella época. Personalidades y miembros de
la élite y las clases sociales más adineradas, se alijaron en aquel lugar que
otrora fue de ensueño. La decadencia llegó con la contaminación de las aguas y
la considerable disminución del caudal
de El Salto de Tequendama. Aun así, el hotel mantuvo sus puertas abiertas hasta
los años 50, época en el que el Ministerio de Obras Publicas colombiano lo
vendió a un particular. A partir de esos momentos, pasó por muchas manos, hasta
llegar a la Fundación Ecológica El
Porvenir, su actual propietaria, que gestiona las instalaciones con la
mirada puesta en el futuro.