sábado, 4 de agosto de 2018

Angkor Wat y el enigma del cero






Desaparecida durante el régimen de los Jemeres rojos, la estela K-127 del famoso templo camboyano en la ciudad de Angkor Wat, se constituye el primer testimonio del uso del <<cero matemático>>

Para documentar su último libro -Findin zero-, el matemático Amir Aczel ha rastreado los lugares donde se representó por primera vez este signo numérico de valor nulo, cuyo uso como notación posicional se atribuye a la civilización india. La cercanía geográfica explicaría que el primer <<cero indio>> apareciese inscrito en el templo de Angkor Wat, concretamente en la estela K-127, donde se indica el numeral 605; pero esa importante pieza arqueológica se perdió en la década de 1930, durante el régimen de terror de los Jemeres rojos. Hasta ahora, Aczel ha relatado en la web Smithsonian su periplo tras la K-127, estela que finalmente descubrió en un viejo almacén a pocos kilómetros del célebre templo. Por sí solo, este hallazgo ya resulta fascinante, pero lo es aun más la historia del <<cero>>, una cifra mágica vinculada con las grandes civilizaciones del pasado, desde la India y la Antigua Gracia, hasta Mesopotamia (2000 a.C.), Egipto 1700 a.C.) y, como no, la cultura Maya, a la que se atribuye la primera representación del cero en América (36 a.C.), si bien se especula con que heredaron dicho conocimiento de una civilización anterior, mesoamericana o no.

Encomendación a los dioses





Gente que desaparece en, vamos decirlo así, en extrañas circunstancias; el terrorismo religioso que se extiende, recordando que en algunas facetas el hombre no ha evolucionado mucho más que las hienas manchadas; que si pasan hambre se comen a sus crías; una crisis que dejado demasiados cadáveres en el camino, y que pese a los <<brotes verdes>>, parece que termina en el instante en el que otra se pone en marcha; una guerra que deja momentos para la reflexión, como la del niño Omran Daqneesh, que con apenas cinco años permanece sentado en el interior de una ambulancia, limpiándose el polvo y la sangre de su rostro sin apenas mover una pestaña, después que su casa en Alepo haya sido bombardeada por varios aviones rusos, y con ella sus sueños sus esperanzas y su inocencia.

Da igual la ideología y el formato. Si abrimos las paginas de cualquier medio nacional o internacional, vemos que la situación que vivimos es para encomendarse a Dios; al Dios en el que cada uno crea, aunque a veces pienso que si éstos existen miran hacia otro lado para evitar su culpa en todo este despropósito; al fin y al cabo tienen, ya que ellos nos han creado.

Siempre hemos de tratar un de buscar un visión positiva de realidad, aunque a veces esa tarea se vuelva más difícil que ascender al Everest en plena tormenta. Por lo tanto, llegados a este punto y partiendo de la idea de que hay algo que intenta poner orden en tanto caos, hemos indagado la posibilidad de contactar con ello, sea lo que sea que tenga el nombre que cada cual desee ponerle. Porque lo que cada vez tenemos menos dudas es de que somos tal vez un "invento" raro, una criatura capaz de hacer reír y llorar en una fracción de segundo. A veces da la sensación de que somos un experimento, el caldo de cultivo en el interior de una probeta en manos de esos dioses. Estas reflexiones en voz alta tienen su consistencia en la siempre incansable búsqueda del ser humano de una fuerza divina superior en la que muchos escépticos ya no creen. Porque para un amplio sector de la comunidad científica internacional, encabezado por el neurocientífico Andrew Newberg, la clave de toda experiencia mística que nos pone en contacto con Dios, una vez más, estaría en nuestro cerebro. El planteamiento es tan sugerente que incluso se ha creado una rama llamada neuroteología, que propone que, más allá de los medios clásicos para entrar en contacto con la divinidad -ayuno, aislamiento,meditación...-, al tratarse de procesos químicos, hay otros medios más evolucionados y eficaces para que dicha experiencia, que no es fácil, se produzca.  Lo que sí es cierto es que existe una lucha invisible entre fuerzas del bien y del mal que la mayoría de nosotros no somos capaces de ver.

lunes, 30 de julio de 2018

La conspiración Iluminati


Los illuminati son, supuestamente, un grupo secreto que quiere dominar el mundo. No se sabe si los illuminati existen de verdad o son solo un mito.

Lo que sí tenemos claro es que Illuminati viene del latín y significa iluminado. Varios grupos a lo largo de la Historia se han auto-proclamado “iluminados”, tras afirmar que habían encontrado la verdad.

Historia de los Illuminati
Hemos realizado una investigación sobre este tema, y aunque es totalmente especulativo, hemos tratado de buscar todas las pistas que responden a las preguntas sobre los illuminatis, su origen, sus objetivos, la composición del grupo, la existencia de illuminatis en España y la difusión de su mensaje a través de cantantes y artistas famosos.

Últimamente se ha oído hablar mucho sobre los Illuminatis, resaltando que son una orden conspirativa que busca dominar a la sociedad. Este grupo o élite Illuminati exclusivo nació en el año 1776, creada por el profesor de derecho y filosofía, Adam Weishaupt, teniendo como finalidad la obtención del conocimiento a toda costa, oposición al dominio religioso, destacándose dentro de sus normas que no todos pueden entrar a su grupo.

¿Lady Gaga, Rihanna, o incluso Barack Obama pertenecen a una sociedad secreta que les ofrece el éxito a cambio de ciertos compromisos? Una teoría que parece bastante absurda y que es apoyada por muchas páginas web cuando hablan de los Illuminati, una sociedad secreta cercana a la masonería que existe desde hace siglos con el fin de ejercer un contra-poder maléfico.

Presentes en la novela de Dan Brown, “Ángeles y Demonios“, los Illuminati generan un montón de dudas y preguntas, mientras que su propia existencia nunca se ha probado.

¿Quiénes son los Illuminati? ¿Por qué las estrellas mediáticas estarían unidas a esta nebulosas? ¿Cómo utiliza esta secta a los artistas para transmitir sus mensajes a las masas? Nos adentramos en una teoría de la conspiración tan paranoica como intrigante.


Los Illuminati no son ni más ni menos que la élite de la élite, la sociedad secreta más poderosa del mundo. Creada en el siglo XVIII, el grupo de los Illuminati (que significa “iluminados”, en referencia a la corriente de la Ilustración) va a cambiar la historia del mundo: en ese momento, consiguieron derribar las monarquías que impedían el progreso social e intelectual. A los Illuminati se les atribuye también la Revolución Francesa, pero no creo que esta secta persiga nobles causas: según ellos, la gente es ignorante y estúpida por naturaleza. Los Illuminati serían de hecho una élite ilustrada que usaría la democracia para llevar a cabo sus ideas.

domingo, 29 de julio de 2018

¿ES LA TIERRA PLANA?



Muchos teóricos de la conspiración hablan de la tierra plana ¿sera verdad? Algunos hablan de un engaño de las élites para confundir a las masas con la falsa teoría de la tierra plana.