El destino del oro Nazi

El Ejército del III Reich expolió infinidad de riquezas de los países que invadió, especialmente Francia, además de hacerse con los bienes de millones de judíos asesinados en las cámaras de gas. Al finalizar la II Guerra Mundial dichas riqueza acabaron en manos de servicios secretos estadounidenses. Así, en 1945 el oficial de inteligencia Allen Dulles, que terminaría siendo el director de la CIA, advirtió al general Patton de la existencia de una parte del tesoro nazi, valorado en 315 millones de dolares, oculto en una mina alemana. La fortuna acabó siendo transferida al Banco Central de Alemania bajos fuertes medidas de seguridad, y fue empleada para financiar operaciones secretas de inteligencia estadounidense en Alemania, como la creación del grupo staybehind en ese país. El espionaje de EEUU también se hizo con el tesoro expoliado por las tropas japonesas, aliadas de Hitler durante la guerra. Su valor se calcula en miles de millones de dolares, que fueron invertidos en la financiación de la recién creada CIA que, de este modo, podía llevar a cabo toda clase de operaciones sin depender de fondos políticos y, por tanto, sin que el Congreso de EEUU tuviese conocimiento de las mismas.

El teniente coronel de las SS Otto Skorzeny, quien llevó a cabo la operación que liberó al dictador italiano Benito Mussolini de sus captores, fue conocido como "el hombre más peligroso de Europa". Al finalizar la guerra se refugió en la España de Franco, donde creó la empresa de mercenarios Paladin Group, que realizó trabajo para multinacionales, el régimen franquista, el apartheid sudafricano, diversos servicios de la OTAN y la CIA en el Viojo Continente. Se cree que Skorzeny fue uno de los creadores de lar redes de huida de prominentes nazis hacia latinoamérica. Además, según relatan Michael Bar.Zohar y Nissim Mishal -dos de los mayores especialistas en espionaje de Israel- en su libro Las grande operaciones del Mossad, Skorzeny llegó a un acuerdo con la inteligencia israelí para ofrecer información sobre ex-militares nazis que colaboraban con gobiernos árabes enemigos del Estado hebreo, a cambio de la promesa de que no seria detenido no asesinado por agentes del Mossad.